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Mostrando entradas de julio, 2019

Día 100 Shurouk Hammoud

Shurouk Hammoud 1982 Siria Realización tardía Como un imán desagradable todos los corazones de hierro se sienten atraídos por mí acumulo sudor, lágrimas y polvo como una vieja servilleta de usos múltiples. La lluvia que corteja a los corazones de los amantes azota mi alma a la que no le queda nada sólo retazos de espera, y alardea con su fuerte puño como un boxeador retirado. Así que con el sarcasmo de una persona que no tiene nada que perder; Te lo digo: Nada me ata a esta tierra sólo mis pies.

Día 99 Angye Gaona

Angye Gaona 1980 Colombia Paso del jaguar sobre el blues Lo que llevo es mar; salado y azul es lo que llevo. Lo golpeo y suena un abismo; tambor insondable es lo que llevo. Lo que llevo va conmigo, de un lado a otro; se queda aunque yo cambie. Llanura sin pozo, canción de arena y sed. A flor, la traición. Acampan trampas en lo que llevo Sobre la piel del animal, frente al fuego llego y esta gota de sal, esta lágrima azul, salen de mí, se derraman en la orilla luminosa. A la verdad, a la verdad del fuego, lo que llevo.

Día 98 Camila Sosa Villada

Día 98 Camila Sosa Villada 1982 Argentina Instrucciones para mi muerte 1 en mi epitafio debería leerse: aquí yace carne de arrabal que fue pudriéndose en vida, todo su cuerpo estaba lleno de pequeñas pero insoslayables cicatrices, su pelo era oscuro y estaba un poco seco. vivió como una dragqueen las veinticuatro horas del día, fue travesti hasta la muerte. pensaba que el mundo era profundamente homosexual. creyó. tuvo una profunda fe, hecha de antiguas decepciones. creyó en la vegetación, en las selvas, en las porciones vírgenes de la tierra, creyó en un corazón-imán que nos mantiene atados a este planeta y a este destino, creyó en el destino y en el azar, creyó en la muerte, en los hombres que amó aun cuando mintieran, tenía fe ciega en que siempre es más noble la mentira de vivir en otro mundo, que la miserable verdad que nos da como limosna el capitalismo. creyó en sí misma, se conoció, se tomó el

Día 97 Elisa Lucinda

Elisa Lucinda 1958 Brasil El poema del semejante El Dios del parecido que nos cose en igualdad que nos papel-carboniza en sentimiento que nos pluraliza que nos trivializa por bajo y por dentro, fue ese Dios que dio destino a mis versos, fue Él quien les arrancó la ropa de individuo y les dio otra de individuo aún mayor, aunque más justa. Me asusta y me calma ser portadora de varias almas de un solo sonido común eco ser reverberante espejo, semejante ser la boca ser la dueña de la palabra sin dueño de tanto dueño que tiene. Ese Dios sabe que la palabra “alguien” es apenas el singular de la palabra “multitud”. ¡Qué grande mundo! Todo el mundo besa todo el mundo anhela todo el mundo desea todo el mundo llora algunos por dentro algunos por fuera alguien siempre llega alguien siempre se demora. El dios que cuida del no desperdicio de los poetas me dio esa fiesta de sim

Día 96 Claudia Lars

Claudia Lars 1899 – 1974 El Salvador Dibujo de la fuga (I) “Nunca se ha visto un blanco, un encarnado, tan amorosos como el lindo verde.” Andrew Marvell El árbol y su cielo. Ya despierta la fábula en las cosas. El cielo de mi risa sobre el ágil velamen del columpio. Yo tenía la nube, también la huella fina de los pájaros y un reino verde con semillas verdes y el mar en el olfato. Por aire humedecido imaginad el ángel de las flores. Por ríos invisibles los jardines dispersos en mi frente. De su centro de sangre alzado el corazón, el fino huésped. Jnto a párvulas sombras musgo de leche y encendidas anclas. Yo tenía mi cuerpo y una fruta sin vello y dos abejas. Me bañaba desnuda entre naranjos, me comía el augurio de los tréboles. El modo de mi casa -hecho de arrimo y piedras vigilantes- iba de viaje en un antiguo viaje y en un libro de peces. Los ojos de mi padre er

Día 95 Lucía Nogueira

Lucila Nogueira 1950-2016 Brasil Sentimiento súbito Porque tú nada sabes del insomnio no vengas así despreocupado con ese universo de frases protocolares y toda una higiene pasteurizada de ternura cuidado no te aproximes demasiado existe una parte de mí donde nadie llegó aún y el desespero siempre hace que la gente precise creer en todo. Voy quedando cada vez más con miedo de ese sentimiento súbito el agua que lavó las letras de la biblioteca es señal de que el amor y la palabra exigen renovación que tanto estudio no resuelve el desamparo y que continúa deshabitada la casa que soy fínjome autobiográfica y renazco como personaje espasmo de electroshock yo sirvo a mi señor ducha de electricidad yo sirvo a mi señor y basta que su tono de voz sea un poco menos tierno que yo ya siento dolor como quien escoge una ensalada de rúcula en un menú de terciopelo oscuro tú estás sentado en una poltrona de acero

Día 94 Nina Silva

Nina Silva 198… Brasil Ellas en mí Mis antepasadas ​​son de la bandeja, del tambor y de la cinta. Adornos y signos, yo soy una aprendiz. Es la cuna, los brazos y pechos, sin fin y sin tregua. Experiencia en el dolor, la sabiduría, Sankofa feroz oso en el pensamiento, sobre los hombros soportan y traducen las historias. Preciosa, preciosa, preciosa. La perfección que una pintura no se puede reproducir, son las líneas de tejidos, órganos y las cicatrices que me representan. Candaces, madres, bahianas, Unidad en mí, yo las reconozco y las celebro con una simple mirada en el espejo. En mi lloro, en mi sonrisa, en mi respiración. Lo sagrado en la carne, soy yo MUJER NEGRA divinidad.

Día 93 Ho Xuan Huong

Ho Xuan Huong 1772-1822 Vietnam Pabellón de observación de primavera Una suave tarde de primavera llega alegremente, sin nubes por el polvo del mundo. Tres veces el timbre suena como una ola. Vemos el cielo boca abajo en charcos tristes. El vasto mar del amor no puede vaciarse. Y las fuentes de gracia fluyen fácilmente en todas partes. ¿Dónde está el nirvana? Nirvana está aquí, nueve de cada diez veces.

Día 92 Na Hye-sok

Na Hye-sok 1896-1948 Corea del Sur Nora Yo era una muñeca- una muñeca como hija de mi padre una muñeca como esposa de mi marido. Yo era un juguete para ellos. Permito a Nora ir con cuidado la dejo ir, derribando los altos muros y abriendo las puertas a profundos cuartos interiores, la dejo suelta en el aire y se llena de libertad. Yo soy un ser humano, incluso antes de ser esposa de un marido y antes de ser madre de los niños en primer lugar, soy un ser humano. Yo soy un ser humano, las cadenas ya están rotas el camino hacia la libertad está abierto y el poder dado por el cielo está repleto. Ah! jóvenes muchachas, seguidme como a vuestro propio despertar levantaos y ejerced vuestro poder! La luz de un nuevo día está brillando.     Traducción del inglés: Ana Muela Sopeña

Día 91 Moon Chung-hee

Moon Chung-hee 1947 Corea del Sur Canción de la mujer madura Llegó una estación extraña que no es primavera ni otoño. Nos pusimos los zapatos de tacones puntiagudos además andábamos levantando la nariz. Aunque me ponga los zapatos sin tacones y cómodos sin mucha importancia llegó la estación donde puedo observar ágilmente el mundo. Me molesta usar ropas caras y accesorios lujosos estoy desnuda de mi pecho por lo que me quité todo a la añoranza y obstinación que me sentí nerviosa llegó la estación buena donde nadie me mira aunque yo iría al mar del Este o quizá no. Está creciendo frondoso el cuento sobre hijos y dolencias más grande que una fruta y más rojo que una hoja caída cuando empezamos a hablar. Llegó a esa estación gorda y fantástica. Versión del coreano de Joung Kwon Tae y Jorge Orendáin.

Día 90 Simin Behbahami

Simin Behbahani 1927-2014 Irán Yo he crecido Yo he crecido, yo he crecido, crecido de repente de la raíz del amor y del frenesí sobre la tierra y la sangre, ¡ay! ¿Qué es este crecimiento y la foliación, sino algo menos que inútil? ¿Qué es con este granizo, este temor a la muerte, esta vida corta? Muchos brotes sin florecer cayeron del arbusto. ¡Estoy avergonzada de estos florecimientos inoportunos! Cada hoja mía, sentada junto a la flor, narra cuentos sobre la daga contra el corazón. Pensé prender la lámpara del arrepentimiento del amor quizás la razón venga a guiar el desvío de este alma. ¡Ay! ¡Ay! La tempestad lo extingue ¡oh, Dios, oh Dios, el demonio me engaña! Es mi alma y el amor cruel, ¿qué hará efectiva esta llama, en este montón de paja? El fuego de la imagen de tu amor, dio un calor de rubí a la bandeja plateada de mi poesía, ya sea por casualidad o a propósito.

Día 89 Asieh Amini

Día 89 Asieh Amini 1973 Irán Pesadilla Mi hogar mi cuarto mi cama mis labios incluso el marco de esta ventana cerrada huelen a pólvora. ¿Cuántas veces te he dicho: “No vengas a mis sueños con un arma?”

Día 88 Sepideh Jodeyri

Sepideh Jodeyri 1976 Irán A las colinas a todos mis compatriotas en el exilio Quizás fue mi vida apenas la que quedó en suspenso de tus ojos enrojecidos. ¡Corre, oh luz de mi cuerpo, corre! Quizás fue solo mi negra percepción como quien se siente culpable detrás de una puerta. ¡Debería arrasar con todo       del cementerio de Al-Baqi al de Xaravan Y huir a las colinas! ¡Debería llevar conmigo         las pequeñas canciones del alma Y huir a las colinas! ¡Debería adoptar                     el nombre a la moda de Teheran Y huir a las colinas! ¡Corre, oh luz de mi cuerpo, corre! Una y otra vez grito apreso tus oídos una y otra vez y grito...             ¡El mundo es mi pecado, oh manchas sin sentido!             ¡El mundo es mi pecado, oh risa sin cuento!              Y yo soy             Un grito. ¡Debería llevarme       esos ridículos pecados y huir a las colinas! Doce, nuestra cuenta es de doce el cruel maqu

Día 87 Parvin E`tesami

Parvin E`tesami 1907 – 1941 Persia/Irán Las lágrimas del huérfano Caminaba cierto día desfilando el rey por la calle mayor Elevándose de toda calle y azotea, de fervor un clamor y entre ellos la voz de un huérfano se oyó que preguntó ¿qué era aquello que le daba, a la regía corona esplendor? Y fuele uno y respondiole, no sabemos nos de qué se trata mas cierto es que nos encontramos, ante género de gran valor y a ellos acercose una anciana, enjuta y corcovada que decía lo que veis son lágrimas de mis ojos, y sangre de vuestro corazón con ricos ropajes y bastones de mando, a nosotros engañaron y ya hace años que conoce a su rebaño, este lobo predador en las mejillas de los huérfanos mirad, las gotas de lágrimas caer para así saber donde residen, de las relucientes gemas el valor ¿de qué te sirve –Parvin- decir la recta verdad, a los que torcidos caminan ¿Acaso alguien a quien el correcto y recto hablar, no le cause sinsabor? Tradu

Día 86 Forugh Farrojzad

Forugh Farrojzad 1935 – 1967 Irán La muñeca de cuerda Más que esto, ¡Oh, sí! más que eso se puede quedar callada en los poderosos brazos de un hombre puede ser una hembra bella y sana con un cuerpo como un suave mantel de cuero con dos pechos grandes y turgentes en la cama de un borracho, un loco o un vagabundo se puede manchar la pureza de un amor se puede estar arrodillado toda una vida con la cabeza agachada a los pies del sarcófago frío de un santo se puede ver a Dios en una tumba anónima se puede encontrar la fe con una moneda insignificante puede descomponerse en el recinto de una mezquita como un viejo lector de oraciones se puede mezclar con las imágenes más inútiles una puede ser igual que una muñeca de cuerda viendo su propio mundo con dos ojos de cristal una puede permanecer dormida en una caja forrada con un cuerpo lleno de paja durante años entre encajes y oropel en respuesta a cada apretón obsceno de una mano una puede

Día 85 Meena Kandasamy

Meena Kandasamy 1984 India Backstreet Girls Para la policía de la moral Esta mujer, ella es la puta. Y esa chica de ahí, ella es la insaciable. Y yo soy la perra con tatuajes sobre la impúdica cadera. Esta oscura dama ha bramado en su discurso, Esta otra golpea oro como una bruja de medio tiempo, Y yo soy una arpía con veranos en mi nombre. Con las lenguas desatadas, tragamos soles. Firmes como putas, desvestimos hombres al azar. Sin sueño, hay polvo de estrellas en nuestros párpados. Y sí, queridos míos, todas somos amigas. No habrá sangre en nuestra cama matrimonial. No somos aquellas a las que eliges para ser tu esposa. No somos aquellas a las que puedes dar una sentencia de por vida.

Día 84 Aranya Johar

Aranya Johar 1998 India Guía de género para una chica morena El primer chico que sostuvo mi mano me dijo “los chicos no quieren oír hablar de vaginas sangrantes”. Mi joven ser pudo oler la misoginia. Las vaginas están solo para ser folladas, los pechos solo están para ser chupados, las bocas solo para chupar. Es verdad, lo sé. Mi cintura debe ser comparada con un reloj de arena. Mi voz debe estremecerse y decir “oh, por favor, más rápido”. Sin embargo, guardo silencio. Porque todo se reduce a la interacción sexual. No solo conmigo, también con mi madre, mis hermanas, amigas, todas acelerando el ritmo después de las 8:30 de la tarde. Mi mamá diciéndome que no lleve faldas tan a menudo. Nirbhaya y las demás, dejadas en el olvido. No queremos ser otra hija de la India, ¿verdad? Así que llevo jeans largos y camisetas cerradas, no enseño mi escote ni un   poquito de cadera. No quiero que lo confundan con que quiero algo. Po

Día 83 Sujata Bhatt

Sujata Bhatt 1956 India Arte poética con amapolas y pájaros Puede que pienses que así funciona la traducción: empiezas con amapolas y terminas con pájaros. O empiezas con pájaros y terminas con amapolas. Puede que sientas que noche tras noche tu libro se sueña hasta llegar a ser. Un día, el libro dice que quiere ser pintado – no escrito. Al otro día, el libro anuncia que es un jardín. Si disientes se ofenderá. Pronto te hará nuevas exigencias: “Tráeme unas amapolas doradas de California”, dice. Y después: “Quiero ver esas amapolas blancas y exóticas de los Alpes – puede que algunas incluso sean amarillo pálido. He oído que son tan raras como el tigre blanco. Ve, búscalas”, dice. Justo cuando creas tener lo que necesita el libro dirá, “Ahora quiero que encuentres la más exótica, la que crece con mayor dificultad – una amapola azul del Himalaya. Anda, ve”, instará. Puede que ya lo hayas adivinado: el

Día 82 Amrita Pritam

Amrita Pritam 1919 – 2005 India Perro callejero Esto sucedió realmente en el pasado— cuando tú y yo nos separamos    sin ningún remordimiento— tan sólo hay algo que no llego a comprender. . . Cuando nos estábamos despidiendo y nuestra casa se puso en venta en el patio las ollas y cacharros tirados por doquier         quizás miraban fijamente en el interior de nuestros ojos y otros que estaban boca abajo          tal vez escondían sus caras de nosotros. Sobre la puerta la enredadera descolorida a lo mejor quería confiarnos algo           — refunfuñando al grifo.         Cosas como estas nunca las pienso pero aparecen en mi mente una y otra vez: cómo un perro callejero siguiendo un olor llegó a este cuarto vacío cerrándose la puerta tras él. Tres días después cuando la casa cambió de propietario intercambiamos las llaves por dinero entregamos los candados al nuevo dueño le mostramos todas y cada una de las habitacion